Frente a ti, oh mar,
siento dulce calma
que alivia mi pesar.
siento dulce calma
que alivia mi pesar.
Hablo contigo
porque eres mi amigo.
Me agrada tu oleaje
y potente bramido.
Algún día te presentaré
al amor de mi vida.
En la arena
escribí su nombre y el mío,
abrigando la esperanza
de tenerla aquí conmigo.
Me sumerjo en tu profundidad,
quedo en éxtasis,
no quiero despertar.
Siento el abrazo
de mi padre celestial,
quisiera permanecer así
por la eternidad.
Habría que respetar el mar; todos y cada uno de nosotros. Es una pena que, sobre todo en verano, se convierte en el mayor cagadero y urinario del mundo
ResponderEliminarEs correcto, totalmente de acuerdo. 👍
EliminarMe gusta ese diálogo íntimo con el mar. Seguro de que te guarda los secretos como un gran amigo.
ResponderEliminarEs correcto. Me gusta caminar por la arena, sentir su brisa salobre me produce paz. Bendito sea Dios por su hermosa creación.
EliminarLindo y muy honesto, muy de ti. Enhorabuena!
ResponderEliminarGracias, muy amable.
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